UPyD en Muro

En un momento en que muchas fuerzas políticas basan su ideología en las particularidades diferenciadoras de ciertos grupos sociales, nosotros intentamos buscar aquello que nos une y que nos puede llevar a cohesionar a un pueblo, para conseguir el mayor grado de bienestar para todos.

Nos unen los proyectos comunes para el futuro. Nuestro lema “lo que nos une” usando “el sentido común”, puede ser el punto de partida para lograr una definición de UPyD en Muro.

UPyD adopta el “Diagnóstico” realizado en Muro para la “Agenda Local 21” como parte de su programa político y como forma de hacer política. Era la primera vez que el pueblo de Muro, de forma democrática directa, elaboró unas propuestas de mejora de nuestro pueblo en todas las áreas de actuación municipal, un trabajo fantástico que demuestra que la democracia real y participativa por parte de los ciudadanos es posible y efectiva. Hoy en día, hay formas complementarias de participación ciudadana, además de la simple delegación en los partidos políticos. El pueblo, en política, tiene mucho que decir.

Desde nuestro punto de vista el mayor problema que afecta a Muro es la falta de un concepto general para el pueblo. Sólo es a través de la elaboración de ese concepto y la aceptación de este concepto por todos, lo que llevará a un auténtico desarrollo de Muro. Si somos un municipio atractivo para las familias jóvenes, un pueblo turístico o un pueblo dormitorio, un pueblo industrial o ganadero, un pueblo orientado al comercio o agrícola, etc, tenemos que decidirlo entre todos. Las acciones que se hagan a posteriori, irán todas en función de la premisa inicial, p. ej.: no se puede fomentar el turismo y por otra parte hacer los tan criticados polígonos industriales en cada entrada al pueblo.

UPyD pretende lograr una adecuada separación entre la Administración y la Política, con una Administración profesional, transparente, responsable, evaluable, eficiente y eficaz. Las cuentas claras y el trabajo, bien hecho.

Proponemos la limitación de mandatos por ley, para estimular la renovación de las cúpulas políticas. Dos mandatos consecutivos de cuatro años cada uno, con un total de ocho, parecen suficientes para desempeñar adecuadamente cualquier mandato. Proponemos además la elección directa de los alcaldes para prevenir pactos postelectorales que desvirtúen o tergiversen la voluntad ciudadana y la creación de sistemas más rigurosos de incompatibilidades entre cargos públicos y negocios privados.

Javier Moreno

Coordinador de UPyD para la comarca “Es Pla de Mallorca”